A través del movimiento y de la interacción con los juguetes los niños ponen a prueba sus habilidades, las de cada una de las partes del cuerpo, activan la imaginación y se relacionan con otros.
Al jugar con un carro de montar, descubren que pueden explorar muchas posiblidades de movimiento: arrastrar, empujar, alzar, subir, bajar, y hacerlo andar.
Cuando juegan con un balón aprenden que pueden tirar, lanzar, patear, recibir, guardar, sacar y balancearse encima.
Al realizar movimientos físicos comienzan a interactuar con diferentes elementos que les permiten correr, trepar una escalera, gatear por un pasamanos, saltar desde un muro y deslizarse por el rodadero en un parque.
El realizar actividades físicas les permite explorar, deslizarse, gatear, caminar y arrastrarse.
La competencia motriz se logra en la medida en que los niños interactúan y exploran los diferentes lugares que frecuentan.
Myriam Suárez
Asesoría en pautas de crianza
Psicóloga
Cel :3104865141




