Una manera amable y divertida para los niños es aprender a través de sus sentidos; explorando, moviéndose y experimentando en su medio ambiente cotidiano con las actividades que hace diariamente.
Durante sus rutinas los padres y cuidadores pueden estimularlos permitiéndoles:
- Tocar los alimentos a la hora de comer.
- Animarlos a probar diferentes sabores y texturas.
- Jugar con espuma y agua durante el baño.
- Mirar láminas de cuentos.
- Escuchar diferentes sonidos de la casa y mostrarles que los produce: lavadora, aspiradora, timbre, instrumentos musicales, reloj, pito y campana.
- Oler objetos y comida: café, frutas, perfume, jabón, crema.
- Tocar diferentes texturas: harina para hacer arepas, plastilina dura y blanda, algodón, pintura.
- Jugar a manipular y verter arroz y gelatina.
Durante sus rutinas los niños pueden aprender mucho del mundo que los rodea.
Gloria Ines Suárez
Asesoría en pautas de crianza
Cel: 3187172344




